miércoles, 30 de octubre de 2013

La guerra de los espías

El Tratado del Atlántico Norte dice que un ataque a un miembro de la Organización podría ser considerado un ataque contra todos los estados de la Organización. No menciona el caso de que el atacante sea un estado miembro de la Alianza. También la OTAN garantiza las libertades, concretamente en su preámbulo dice que están "Decididos a salvaguardar la libertad, la herencia común y la civilización de sus pueblos, basados en los principios de la democracia, las libertades individuales y el imperio de la ley". Parece claro que en la sede de la NSA a alguien se le ha olvidado el enunciado del Tratado firmado en 1949 en Washington.

El espionaje es una práctica inherente a los grupos humanos, siempre ha existido. Lo repugnante y escandaloso del actual seguimiento y vigilancia a la que Estados Unidos ha sometido a los países europeos, es que ha sido realizado sobre "aliados" y "socios". Seguro que los "enemigos" no espían tanto a la vieja Europa como el "amigo americano". Para hacernos una idea del tamaño del escándalo, basta ver que un ejecutivo paquidérmico como el de Rajoy se ha visto obligado a responder a la afrenta al orgullo y la seguridad nacional. El más reciente episodio del sainete es la acusación americana de que los europeos nos espiamos a nosotros mismos para beneficio suyo. Todo es posible.

No es de extrañar la nueva caza de brujas desatada por el Sr. Obama, premio Nobel de la Paz, pero no contra sus organizaciones de espionaje, si no contra los ciudadanos - Snowden, Greenwald- que las han difundido y que son obligados a vivir en el exilio, alejados del paraíso americano de las libertades individuales. Las revelaciones han permitido a algunos gobernantes escandalizarse públicamente por un espionaje que seguramente permitían en privado ¿O es que sus servicios secretos no habían sido capaces de detectar el espionaje masivo?

Realmente el espionaje anglosajón sobre el resto del mundo es práctica tolerada desde hace décadas. Los llamados "Cinco ojos" o Red Echelon, controlada por la comunidad UKUSA (Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda) espía política y comercialmente a todo el planeta. ¿Acaso pensamos que la colaboración de Apple, Google, Facebook o Microsoft con el espionaje se hace a cambio de nada o por "patriotismo"?, ¿Tiene sentido hacer un tratado comercial a gran escala con quien espía a las empresas europeas y les arrebata contratos internacionales? y por último ¿No se podía emplear en otros asuntos el dinero que se gasta en una organización inútil, injusta e inservible como la OTAN?

2 comentarios:

  1. Hola, La negociación del tratado comercial es necesaria debido a la nueva situación de EEUU y Canadá como productores fuertes de hidrocarburos. La eficiencia de estos sistemas de escuchas masivas es muy fácil de poner en entredicho: ¿cuantas intercepciones por millón de $? Por seguro los directores de esas agencias tienen detractores internos.
    Y por otro lado está Rusia, que teme perder la exclusividad de la venta de gas en centro Europa y facilita esta campaña de descrédito.

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