martes, 31 de diciembre de 2013

El Tíbet y el made in China


2006, el Comité de Apoyo al Tíbet presenta una demanda contra los cinco ex altos cargos del Gobierno de la República Popular China por “genocidio, crímenes de lesa humanidad, tortura y terrorismo contra el pueblo tibetano”. Con una rápidez inusitada –siete años no es nada- en 2013, la justicia española emite una orden de detención internacional contra el ex presidente chino Jiang Zemin (1993-2003) y el ex primer ministro Li Peng (1988-1998).

La reacción china no se hizo esperar y amenazó al gobierno Rajoy, asegurándole que el affaire podría afectar a las relaciones con Madrid. Las amenazas contra los países que cuestionan su dictadura y sus frecuentes violaciones de los derechos humanos, suelen hacerse realidad. Los noruegos, que cometieron –a ojos chinos- la horrible tropelía de conceder el Premio Nobel de la Paz al disidente Liu Xiaobo, tienen congeladas sus relaciones diplomáticas con el gigante asiático, que además ha boicoteado las importaciones de salmón noruego. De este modo España, si las torticeras maniobras judiciales del Gobierno no lo impiden, pasará a formar parte del club de los países que incomodan a los hieráticos líderes de la China comunista-capitalista del siglo XXI. Por supuesto, esta situación horroriza al gabinete español, que es el único de su entorno que no ha expresado su apoyo al Tíbet. Que unos magníficos negocios se vayan al garete por unos derechos humanos de nada –además de tibetanos a los que nadie conoce- les debe parecer inadmisible.

Lo importante del caso es que expone con toda crudeza el drama de los tibetanos. El sherpa Thubten Wangehen, que posee la nacionalidad española denunció la situación de su país, ocupado militarmente por China desde hace medio siglo. El Tíbet ha sufrido desde entonces un proceso de “limpieza étnica” para que los emigrantes chinos fuesen mayoritarios sobre la población autóctona. Entre estas medidas denunciadas por Wangehen se encuentran la implantación de la ley marcial, los desplazamientos forzosos de poblaciones, campañas masivas de esterilizaciones, torturas de disidentes y traslados a la región de contingentes de ciudadanos chinos para dominar y eliminar a los tibetanos. Conviene recordar que la UE impone sanciones económicas a otros países incómodos por mucho menos, pero claro, sus países no producen con el Made in China ni tienen mercados con centenares de millones de consumidores, por eso con la R.P. China se limita a emitir comunicados.

El último día de este 2013 que finaliza es un buen momento para hacer una acción solidaria, desde aquí se puede firmar a favor de la libertad del pueblo tibetano. Buena San Silvestre. Hasta el año que viene amigos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario