Seguimos comprobando día a día la desfachatez de este Gobierno que escándalo tras escándalo sigue fiándolo todo al mal funcionamiento de la justicia y a la posible prescripción de todos sus delitos. El último episodio, el de la Ministra pija, la excma Doña Ana Mato.
Nos hicieron creer que no sabía que su exmarido, un tal Sepúlveda, un personaje de película de Al Capone y en nómina del PP, había metido en el garaje de su exclusivo chalet un Jaguar ni mucho menos quién se lo había regalado. Como los españoles tenemos el premio a la condescendencia y al perdón (nos vendrá de nuestra educación católica....) nos lo quisimos creer, más cuando nuestra Justicia archivó el caso como si la cosa no fuera con ella. La verdad es que la chica no tiene pinta de tener muchas luces, una Vogue de verdad con exceso de rayos uva.
Pero lo que se ha extraído del Sumario de Gurtel ya es propio de sinverguenzas de calaña excelsa, ya que se sirvió durante años de prebendas regaladas para incluso enviar a la chica del servicio a su país de origen y a viajar y recibir regalos sin preguntar nada.
Y tan tonta no se puede ser, o bien si lo es, no es merecedora de una cartera ministerial por lo que llevo sentado días esperando su dimisión o que el peor Presidente de Gobierno de nuestra Democracia (y pensábamos que ya estaba ocupado el puesto) la cese inmediatamente.
Mientras tanto, hago cuentas de cuánto confetti se debe tirar en una fiesta para gastar casi 5000 euros.......
Asco de vida.....
Salud y república
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